Jesús se dirigió al capitán y le dijo:
“Ve. Lo que creías que podía pasar, ha pasado”.
—Mateo 8:13 - Biblia El Mensaje
Estas palabras contienen una poderosa lección para nosotros hoy: tendremos lo que creemos. Todo lo que creemos en nuestro corazón y lo que pensamos en nuestra mente puede manifestarse en nuestra vida. En otras palabras, nuestras creencias tienen poder creativo. Permíteme ilustrar esto usando la fe y el miedo.
Por la fe, Dios creó el mundo en el que vivimos. Por la fe, Sara concibió y dio a luz a un niño, aunque ya había pasado su edad de tener hijos. Por la fe, Sansón mató a mil hombres con solo una quijada de asno. A lo largo de la historia, el pueblo de Dios cantó sus alabanzas por fe mientras era perseguido o incluso quemado en la hoguera.
La fe es apoyarse enteramente en Dios “Seguimos recibiendo noticias de su fe en Cristo Jesús y del amor que, de manera constante, extienden a todos los cristianos.” (Colosenses 1:4). La fe cree que algo bueno sucederá. Cree que Dios puede hacer lo que, de otro modo, sería imposible. La fe confía en Dios por lo que aún no puede ver. La fe contiene poder creativo.
Así como la fe tiene poder creativo, el miedo también lo tiene. El miedo cree que algo malo va a pasar. La mayoría de nosotros hemos visto que cuando alguien piensa constantemente que algo negativo sucederá, casi siempre ocurre. Muy a menudo me enteraba de una mala situación en la vida de alguien y luego le oía decir: “Tenía miedo de que esto fuera a pasar”.
No estoy sugiriendo que estemos en peligro cada vez que se presenta un miedo. Simplemente creo que cuando una persona persiste en pensar y decir que le van a pasar cosas malas, muchas veces sucede. Los pensamientos y palabras de miedo pueden bloquear nuestra capacidad de escuchar a Dios, haciéndonos actuar tontamente porque el miedo nos impide recibir y seguir su sabiduría.
Para vivir victoriosamente, necesitamos ser guiados por Dios, lo cual requiere ser dirigidos por la fe, no por el miedo. Recibimos las promesas de Dios a través de la fe. Permitimos que el enemigo actúe en nuestras vidas cuando vivimos con miedo.
Permite que te anime a que te preguntes qué crees en cada área de tu vida. ¿Estás creyendo en cosas buenas o tienes miedo de que sucedan cosas malas? ¡Cree que el poder de Dios está en ti y que Dios está obrando en tu vida ahora mismo!
Aplicación práctica:
Aquí tienes cuatro puntos que puedes aplicar diariamente:
Renueva tu mente con la Palabra: Identifica las áreas de tu vida donde el miedo ha ganado terreno y reemplaza esos pensamientos con promesas de Dios. Dedica tiempo diario a leer y meditar en la Palabra para que tu fe se fortalezca y el miedo sea desplazado.
Declara lo que crees: El poder de la vida y la muerte está en la lengua (Proverbios 18:21). Haz declaraciones diarias basadas en la fe. Por ejemplo, en lugar de decir: "Tengo miedo de que esto pase", declara con confianza: "Confío en que Dios está obrando para mi bien."
Actúa en fe, no en miedo: Enfrenta situaciones difíciles recordando que Dios está contigo. Cuando el miedo quiera detenerte, da un paso adelante, sabiendo que tus acciones basadas en fe liberan el poder de Dios.
Rodéate de personas de fe: Es importante tener personas a tu alrededor que te animen y fortalezcan tu fe. Busca una comunidad que ore contigo, te apoye y te desafíe a caminar en fe, no en temor.
Oremos:
Padre celestial, tú me instas a vivir con fe, no con miedo. Así que decido desarrollar una mentalidad de fe, creyendo que sucederán cosas buenas. Ayúdame a no vivir con miedo y a confiar siempre en tu bondad y tu amor. En el nombre de Jesús. Amén.
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gracias!!! excelente
Excelente mensaje y muy cierto